La Evolucion de la Tecnología a lo largo del Paleolítico Inferior (Parte 1).

En este artículo vamos a intentar explicar, a modo de síntesis, un tema tan complejo e importante como es la aparición de las primeras manifestaciones culturales de la humanidad, que vienen representadas por la aparición de las primeras herramientas de las que se tienen constancia; estas primeras herramientas tienen 2,6 millones de años de antiguedad y aparecen en el continente africano, aunque luego se extenderá la técnica de fabricación por Asia y Europa.

Las primeras evidencias que tenemos referidas a conjuntos útiles que son resultado de un proceso de transformación de una materia prima nos muestran una serie de patrones que se refieren al plano tecnológico que no observamos en otras especies distintas a la especie humana. 

La conclusión es que estos conjuntos tecnológicos son resultado de una actividad humana, y esta conclusión venía también a corroborar junto con otros aspectos como la anatomía, la consideración de hombres para los responsables de estos primeros conjuntos tecnotipológicos. Los que realizaban estas industrias arcaicas tenían una idea preconcebida de lo que iban a realizar y unas ideas de previsión de cómo utilizar lo que se iba a fabricar (esto no lo tienen los primates actuales). Esto se sabe porque existe un transporte de la materia prima adecuada hasta el lugar donde se iba a transformar, hasta 10 kilómetros de transporte. Es decir, no utilizaban la primera piedra que encontraban, sino que buscaban las más adecuadas. 

Este primer conjunto tecnológico recibe el nombre de Olduvayense o Modo I,; recibe tal nombre a causa de uno de los yacimientos más importantes donde tales industrias han sido halladas: la Garganta de Olduvai en Tanzania. La especie que tiene el honor de inaugurar el género Homo, y la responsable de esta primera tecnología es el Homo Hábilis hace 2,6 millones de años, no obstante recientes descubrimientos en Etiopía revelan la existencia de marcas de corte hechas con piedra en huesos de animales hace 3,39 millones de años; de ser así (ya que han aparecido las marcas, pero no las herramientas) sería el australopitecus afarensis, no perteneciente al género homo, el primer homínido en utilizar la tecnología del Modo 1. 

Estas industrias arcaicas o de cantos, el olduvayense o Modo 1, es una tecnología desarrollada sólo en piedra, pero con diferentes tipos de piedra. Hay una selección intencional de materia prima; se usa sobre todo lava volcánica como basalto, cuarzo y cuarcita.

Ejemplo muy bueno de la elaboración de tecnología del modo 1 es este video elaborado por el equipo de Atapuerca y alojado en la web arqueolab:


Los tipos más característicos de esta tecnología del Modo 1 son los cantos tallados; la talla de un canto tallado puede tener lascados en una sola de sus dos caras principales, en cuyo caso hablaremos de cantos tallados monofaciales (Chopper); también es posible que tengan lascados en las dos caras, clasificándose como cantos tallados bifaciales (Chopping Tool). El factor monofacial o bifacial de un canto sólo sirve para estudiar su elaboración, pero carece de indicadores cronológicos (es decir, no hay constancia científica de que la talla monofacial precediese a la bifacial).

Los cantos tallados servirían para cortar las articulaciones de los animales, o para aquellas tareas que requieran un instrumento fuerte. Las lascas desprendidas del canto servirían para cortar partes más sensibles.



Los grupos que se asocian a esta industria olduvayense de forma clara son el Homo Habilis (2,5 millones de años), con la duda de si las herramientas con 3,39 m.a de antigüedad fueron elaboradas por los australopitecus o simplemente encontraron rocas con filos cortantes de forma casual, y posteriormente Homo Georgicus y Homo Antecesssor, aunque también continuó en las primeras fases del homo ergaster-erectus. La tecnología del modo 1 salió de África y se implantó en Eurasia (Homo Georgicus 1,8 millones de años), llegando después a Europa (Homo Antecessor 1,3 millones de años) y Asia (Homo Erectus 1,8 millones de años). En realidad, el modo 1 no llegó nunca a desaparecer; se convirtió en una tecnología de fondo, de emergencia, por sus propios rasgos oportunistas, que la convierten en un recurso tecnológico atemporal. En cierto sentido, esto supone una dificultad, porque conlleva la práctica imposibilidad de distinguir su uso como tecnología imperante y su utilización como recurso de emergencia.


Otro videos de interés:




Comentarios